In memoriam de tu gran alma de artista: Teresa Sarto

INMEMORIAM DE TU GRAN ALMA DE ARTISTA 210 CAPÍTULO 3 GOUACHE . PINTURAMAGRA DE COLORES OPACOS A diferencia de la acuarela, en cuyo pigmento prevalece siempre el tono o color transparente, en el gouache la característica fundamental son los colores opacos, con cuerpo, planos y uniformes, aunque en extremo y con habilidad, tales condiciones puedan modificarse parcialmente en beneficio de provocar o combinar otros resultados. La opacidad característica del gouache sucede porque a cada color, aunque se fabrica prácticamente igual que para la acuarela, se le añade siempre una proporción determinada de creta precipitada que actúa como espesante. Recordemos que la creta es un pigmento que tiene cuerpo pero carece de color, por lo cual solo modifica la masa del pigmento de color al que se le haya añadido. El pigmento de color tratado, ganará cuerpo, pero continuará manteniéndose inalterable como color porque habrá teñido totalmente la creta. FABRICACIÓN CASERA DE GOUACHE Aunque no existe una formula universal normalizada para la fabricación de gouache , tampoco deberemos tener ningún inconveniente para intentar conseguir fabricarlo de forma casera. La primera recomendación es acudir a la «tabla de colores», que sistemáticamente recomendamos examinar, para determinar el grado de absorción, opacidad y transparencia que tiene cada color elegido a fabricar, pues desde esta información, podremos decidir y proporcionar correctamente la cantidad de creta precipitada (carbonato de calcio puro artificial) que debemos añadir. Sabremos el punto recomendable de aglutinante total cuando se aprecie que la masa de pintura que estamos fabricando pasa del punto de estar espesa y comienza a ser fluida. Momento del que no conviene apartarse mucho porque buscamos que el color mantenga su opacidad característica. Demasiado aglutinante la convertirá nuevamente en transparente. Proporciones para fabricación casera: • 1 volumen de pigmento en polvo de buena calidad a diluir en: hasta el 30% de goma arábiga. Para esta primera mezcla, depositar el pigmento sobre una plancha de mármol o cristal, añadir lentamente la goma arábiga e ir aglutinando la pasta con una moleta esmerilada, haciendo movimientos circulares, hasta conseguir una consistencia cremosa. Si fuera necesario, durante este proceso puede añadirse una muy pequeña cantidad de agua destilada, gota a gota.