In memoriam de tu gran alma de artista: Teresa Sarto

TERESA SARTO 139 EPISTOLARIO Amigüita del alma. ¡Te diría tantas cosas!. Toda una vida juntas; los recuerdos me vienen a cada instante, son muchas cosas vividas, esa infancia donde tanto disfrutamos, tu casa donde era una más con mi segunda madre incluida, el colegio, los bailes regionales, el baloncesto y los cantos con tu voz de tercera, la adolescencia, los hijos, los nietos. esas risas que siempre nos echábamos cuando estábamos juntas. ¡Que tiempos lejanos y a la vez tan presentes! Me parece mentira que ya no estés y aunque la distancia nos alejó físicamente, tanto tú como yo sabíamos que si nos necesitábamos estábamos para todo, para lo que fuera. Siempre has estado conmigo tanto en las alegrías como en las penas. Siento en el alma no haber podido acompañarte como hubiera deseado en los momentos duros de tu enfermedad, en los que has luchado a brazo partido con tu mal, siempre con esa alegría y optimismo que te caracterizaba. ¡Es la vida! Cada una con sus problemas y no es hora de disculparse. Se me rompe el corazón al no haberte podido dar el abrazo de despedida que me hubiera gustado. Tengo que conformarme con recordar el último que nos dimos, pensando que en breve lo repetiríamos, pero quiero que sepas que estarás siempre conmigo, sobre todo en esos momentos en que la vida, tan dura, me golpee. Sabré que allá donde estés puedo contar con tu ayuda, ¡claro que sí! Te lo dije siempre, desde cuando niña te pedía que me hicieras un cuaderno con tus dibujos, para que cuando fueras una gran pintora y triunfaras, presumir de ser tu amiga. Eras y serás una gran artista. Siempre recordaré con nostalgia tus risas, tu elegancia innata, me admiraba cómo lucía cualquier trapillo que cayera en tus manos, como si fuera la más exquisita prenda de diseño, y no digamos tu arte culinario, solo por el olor sabías qué ingrediente se necesitaba. Siempre me admiró que hasta para eso demostraras tu arte, que lució, como era de esperar, en la obra que nos has dejado, digna de una gran artista. Lo que te propusiste en la vida lo sacaste adelante. Una gran luchadora a todos los niveles, y he tenido y tendré siempre el orgullo de haber sido tu amiga del alma, y lo seguiré siendo allí donde estés. Te llevo en mi corazón y te llevaré toda mi vida. Te quiero. Conchita Vera Conchita Vera